Patagon Journal recibió el siguiente relato de guardaparques de Conservacion Patagonica que recientemente hizo un seguimiento de huemules que habitan las zonas alrededor del Rio Baker, que serían inundadas si las represas de HidroAysén se construyen. Estos huemules, emblema nacional de Chile, son una especie de ciervos en peligro de extinción que esta organización está ayudando a restaurar en la región de Aysén, y más específicamente, a las áreas del futuro Parque Nacional Patagonia. Conservación Patagonia donara los cerca de 80,000 hectáreas que han comprado en el Valle de Chacabuco desde el año 2004 para ayudar a formar este parque, que también incluirá a unos 170.000 hectáreas de la vecina Jeinimeni y Tamango Reservas Nacionales. Esto promete ser un logro muy importante de conservación y, potencialmente, un impulso al turismo de Aysén en la misma escala que Torres del Paine ha sido para la región de Magallanes.
Los siguientes cuentos de fotografía y escritura provienen en parte de Daniel Velásquez, quien ha estado siguiendo los huemules desde hace décadas en esta región, y Luigi Solís, quien está a cargo de la construcción de senderos y la restauración para el futuro parque. Velásquez, Solís y su equipo vieron varios huemules en su reciente expedición de mayo, incluye un ciervo macho que se han monitoreado desde su nacimiento, se llama Silencio, quien es responsable de esta nueva, inspirante población de huemul cerca de la Baker. J.L.
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Prospección Huemules en Área Rio Baker
por Luigi Solís
Galeria de Imagenes:
Siendo las 8:30 de la mañana del día 26 de Mayo, emprendemos viaje con dirección a el sector las “eses” cerca de confluencia Baker Nef, pero como es costumbre antes pasamos a pedir permiso al encargado del campo que prospectaríamos en este caso a Fabián Ibáñez, puestero de la Asociación Gremial de Rio Baker, quien manifestó interés por acompañarnos y participar de la prospección junto al equipo.
Nos dividimos 3 tres grupos, el primer grupo, integrado por Daniel Velásquez y Delmiro Jara hacen la parte superior de la ladera, en la parte media va Fabián Ibáñez y Cristian Rivera, y la línea más cerca del Rio la hago en forma voluntaria, por el interés de poder registrar fotográficamente el Rio Baker antes de una posible inundación, privilegio que no todos tienen y quiero compartir a través del siguiente.
El objetivo de la visita al sector era poder conseguir registro y avistamiento directo de algunos ejemplares de Huemul que se mueven en ese sector de las orillas del Baker.
Siendo las 10 de la mañana comenzamos a avanzar en dirección del escurrimiento de las aguas del Rio Baker (Hacia el Este). Para suerte del equipo encontramos huellas y senderos inmediatamente, se notaban frescas, quizás pensamos del día anterior, la experiencia de las personas en el primer grupo hacía pensar que pronto nos encontraríamos con los ejemplares.
Por largo rato caminamos siguiendo las huellas expectantes de poder encontrarlos y poder cerciorarnos de que ese era realmente el lugar que ellos habían elegido para vivir.
Siendo cerca del medio día decidimos juntarnos para poder comer algo y reevaluar el método de prospección, entre regresarnos sin nada o recorrer otro sector que parecía poco probable de obtener avistamiento por el uso ganadero.
Terminado el almuerzo decidimos continuar finalmente con dirección a la confluencia Baker Chacabuco, por lógica y atendiendo a que las huellas seguían esa dirección.
Solo tuvimos que caminar 20 metros en esa dirección, sin ni siquiera alcanzar a separarnos por grupo cuando Don Delmiro dice, con su pasividad característica de una persona ya con experiencia y que a sus 64 años lo mantienen todavía activo para caminar los cerros de su querido Baker, “acá están los animalitos”. Fue en ese entonces, en que uno empieza a preguntarse al verlos tan dóciles y serenos, como sabiendo que vamos a hacer algo para ayudarlos a mantenerse en ese lugar que ellos eligieron para vivir.
Avistamos 4 animales de ese grupo, 1 macho adulto, 1 hembra juvenil, 1 hembra joven y una cría.
He decido describir con palabras sencillas y verdaderas lo apasionante que fue encontrar estos animales en este sector, posiblemente inundable por las Mega Centrales de Hidroaysen no lo sé aun, tengo puntos de GPS que superpuestos al área de inundación nos dirán si esto es así..
Me considero un patagón de tomo y lomo, Hijo de campesinos esforzados y humildes que casi son autosuficientes, me crie ayudándoles a ordeñar vacas, sembrando la tierra, cortando pasto para el invierno crudo de la Patagonia, arreando las no más de 40 ovejas que pudimos criar solo para comer , año a año, hasta que pude estudiar y con el mismo esfuerzo de antes mis padres pagaron mis estudios técnicos y de 2 hermanas mas, solo siendo unos campesinos.. Eso me hace valorar lo que ahora soy y me hace luchar por mi Patagonia y su vida silvestre..
Este ejemplar se llama “Silencio”, es un animal conocido por los investigadores de la zona. Su vida es conocida y tiene historia y será relatada por personas que han seguido su vida desde cerca y lo han visto crecer y desarrollarse.
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La Historia de Silencio
por Daniel Velásquez
Era el mes de noviembre del año 2006, y durante varios días buscamos a la hembra Puntilla para saber si ya había parido en la Reserva Nacional Tamango. Necesitábamos poder capturar a su cría ya que era parte de una investigación para determinar la sobrevivencia de los huemules – crías y adultos - además de determinar las causas de mortalidad, especialmente las de las crías. La cría de Puntilla nació la noche del 21 de noviembre y se bautizo con el nombre de Silencio. Nombre dado debido a que durante su captura no emite el sonido característico de otras crías. La captura no fue fácil ya que la hembra se había escondido en las terrazas rocosas de la ribera norte del río Cochrane en la Reserva, justo donde nace el río. Después de su captura y durante todo un año fue posible observar a Silencio junto a su madre, moviéndose cercano a la orilla del río y el nacimiento del mismo.
Cuando cumplió su primer año de vida, su madre lo desplazó del área, como sucede con todos los huemules machos cuando cumplen un año de edad, ya que un nuevo hermano o hermana viene en camino y la hembra dedicará todas sus energías al nuevo huemul que viene. Desde ese momento dejamos de ver a Silencio en el área de la Reserva. Desapareció no siendo posible encontrarlo vivo ni muerto. Su madre en ese entonces y hasta el día de hoy vive en la misma área, cercana al nacimiento del río Cochrane.
Puntilla su madre, al momento de su captura el año 2005, ya tenía 3 años. También es importante mencionar que todos los años se preña y el Silencio ha sido el único animal hijo de Puntilla que llega a adulto formando una familia o grupo, así lo indican las demostraciones de raspado que se encontraron.
Después de casi cuatro años y medio, y por los comentarios y datos de algunos vecinos, pudimos ubicar nuevamente al huemul “Silencio”. Aunque su transmisor ya había dejado de funcionar, la marca que le habíamos puesto nos permitió reconocerlo. Se había desplazado aproximadamente 20 Km en línea recta desde el nacimiento del río Cochrane hasta un poco más al norte de la confluencia de los ríos Chacabuco y Baker, sector donde actualmente vive y aunque resulte contradictorio, sector que sería inundado por la central Baker 1 del proyecto Hidroaysén.
Para nuestra sorpresa y felicidad nuestro huemul había sobrevivido llegando a ser un macho adulto, en la búsqueda de nuevas tierras para establecer su propio territorio, formó un nuevo grupo familiar con algunas hembras y sus crías. Y se ha establecido en las laderas abruptas del río Baker, lejos de las áreas que usa el ganado, pero fuera de la protección otorgada por la Reserva.