Incendio en el Parque Patagonia

Correo electrónico Imprimir
Más de 2,000 hectáreas se queman en un incendio que aun está descontroladoMás de 2,000 hectáreas se queman en un incendio que aun está descontrolado
 
Viernes, 28 de Marzo, 18:00 horas–Rápidamente, a medida que todos intervienen en el Valle Chacabuco. Todo el mundo, desde paisajistas, constructores de senderos, mecánicos, abogados, arquitectos, cocineros, pilotos, además de la ayuda recibida por la CONAF y la armada, están ayudando a detener el peor incendio que se haya visto, donde ya se han quemado más de 2.000 hectáreas dentro de las últimas 48 horas. Todos los que estamos acá nos sentimos profundamente agradecidos y orgullosos de cómo este equipo se ha movilizado para proteger el parque. Todos están haciendo todo lo posible y uniéndose para mantener la fuerza.
 
Un equipo se reagrupa para crear una estrategia Un equipo se reagrupa para crear una estrategia
 
El miércoles en la tarde (26 de Marzo), un vecino nos alertó sobre un pequeño incendio que había comenzado dentro del parque, cerca del lugar donde la Carretera Austral cruza el Río Chacabuco (cerca de la zona más al oeste del parque). La causa aun se desconoce, es posible que haya sido una colilla de cigarro lanzada desde un auto que iba pasando. Muy rápidamente, nuestro equipo se movilizó para empezar a detener el fuego.
 
Comienzan a intentar detener el fuego, Miércoles en la tardeComienzan a intentar detener el fuego, Miércoles en la tarde
 
Sin embargo, las condiciones secas del final del verano permitieron que el fuego se expandiera muy rápidamente. Un equipo fue capaz de controlar el punto de origen del fuego mientras otro equipo se movió más hacia el este del valle para enfrentar el fuego desde el otro extremo. Un equipo de veinte personas, incluyendo operadores de maquinaria, trabajaron rápidamente para crear un cortafuego. Sin embargo, no tuvimos suficiente tiempo para detener la expansión del fuego, el cual siguió creciendo cuando entró en un bosque.
 
Durante el Miércoles en la noche hasta el amanecer, un equipo más pequeño logró controlar el camino que da acceso al parque. Durante horas, fueron capaces de poner un límite para que el fuego no siguiera expandiéndose hasta el lado sur de la carretera, donde se ubica el centro administrativo del parque.
 
El fuego en expansión, Miércoles en la tardeEl fuego en expansión, Miércoles en la tarde
 
Pero a pesar de esto, el Jueves temprano en la mañana,  el fuego empezó a expandirse por el lado sur, eventualmente subiendo por el cerro hasta los bosques del Cerro Tamango. Cuando llegó la ayuda de CONAF y la armada para controlar el fuego de este sector, nuestro equipo se concentró en el lado norte del río. Nuestra brigada de bomberos voluntarios, que pudo cubrir una gran zona junto al Río Chacabuco, empezó a ver grandes mejoras mientras lograba extinguir focos de incendio, hasta que comenzaron los vientos de la tarde. A medida que los incendios empezaron a moverse rápidamente y en muchas direcciones, nos apartamos para rearmar los grupos y enfocarnos en las áreas más importantes durante las horas restantes de luz que quedaban del día.
 
Deteniendo un incendio en la ladera de un cerro, JuevesDeteniendo un incendio en la ladera de un cerro, Jueves
 
Uno de nuestros mejores logros hasta el momento ha sido extinguir el foco de fuego que más se expandía en el lado norte de la carretera. Anoche, un equipo liderado por Evaristo Jara, jefe de construcción de senderos, estuvo luchando hasta las 2 de la mañana para poder controlar esta área en estado crítico. Sin embargo, al lado sur de la carretera, los incendios continuaron toda la noche, creciendo por nuevas zonas de la ladera forestada y moviéndose en dirección hacia el centro administrativo del parque.
 
Vista de los incendios desde el centro administrativo del parque, anocheVista de los incendios desde el centro administrativo del parque, anoche
 
Esta mañana, llegó CONAF con más ayuda, trayendo ocho brigadas completas desde distintas partes de la región, mientras que la armada trajo dos brigadas y varios abastecimientos y camiones de bombero.  Entre esta ayuda y nuestro propio equipo expandido, incluyendo miembros del equipo de construcción, trabajadores de nuestros proyectos hermanos, el Parque Pumalín y Proyecto Iberá, nuestros familiares y amigos, sumamos 140 personas luchando contra el fuego.
 
Ahora estamos enfocando nuestras energías para proteger el centro administrativo del parque, ya que el fuego se ha acercado hasta una 1 kilómetro y medio de este edificio. Todas las máquinas están excavando con la máxima velocidad mientras yo sigo escribiendo, para poder crear un cortafuego y detener el incendio antes de que termine llegando hasta acá. Hemos creado planes de evacuación, probado los sistemas de rocío y estamos preparándonos para tiempos difíciles. Con los vientos de la tarde que siguen soplando, el fuego se está moviendo rápidamente en esta dirección, pero en el transcurso de los últimos días hemos comprobado estar bien entrenados  y hemos aprendido bastante sobre cómo controlar fuegos, especialmente en los pastizales.
 
Mapa para ubicar rápidamente donde está el fuego Mapa para ubicar rápidamente donde está el fuego
 
Habiendo pasado dos días luchando contra el fuego, es difícil saber exactamente cómo va a terminar todo esto, o cuales van a ser las consecuencias para el parque. Los guanacos parecen estar saliendo de las zonas del fuego con seguridad; se han quemado muy pocos hábitats del huemul; el otoño es una época relativamente buena, en términos ecológicos, para los incendios debido a que pocos animales dan a luz a nuevos críos o ponen huevos. El camino para manejar al parque ciertamente ha cambiado drásticamente, ya que casi todo el camino de la entrada oeste al centro administrativo se ha quemado, pero esperamos que dentro de algunos años, los pastos van a haber crecido devuelta. En todo caso, es demasiado temprano para pensar en estas preguntas, ya que el fuego sigue quemando con fuerza.
 
Gran parte de las zonas quemadas se ven así: algunos puntos están afectados y otros no.Gran parte de las zonas quemadas se ven así: algunos puntos están afectados y otros no.
 
Pero lo más importante es que estamos todos sanos y salvos, y contamos con planes sólidos para abordar todas las situaciones. Estos días y noches han sido agotadores y desafiantes,  pero esperamos que todo va a estar bien, y realmente agradecemos toda la ayuda que estamos recibiendo.
 
Reza con nosotros para que llueve,
 
Todos acá en el Valle Chacabuco—Álvaro, Claudio, Jorge, Juan, Carol, María Jesús, Fernando, Yonathan, Juan, Francisco, Kris, Doug, Evaristo, Haydee, Diana, Dalila, José, Zhaira, Tania, Alex, Andrea, Camila, Miguel, Sergio, Matt, Miguel, Manuel, Luis, Juan, Don Franci, César, Rodrigo, Gavino, Marín, Sergio, Pablo, Mónica, Pablito, Montserrat, Juan Carlos, Nelson, Hernán, Ale, Joan, Diego, Cristián, Rodrigo, Macarena, Carolina, Carlos, Francisco, Nino, Sara, Dago, Ale, Andrés, Bruno, Cristián, Geno, Javiera, Flavio, Nadine, Eli, Nico, Tamara, y muchos otros más.