Nueva ley de conservación permite proteger "intangibles" que van desde el silencio de un paisaje hasta información biogenética

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El Mostrador - Junio de 2016 será recordado como un mes excepcional para la historia. Esto, debido a que el sábado el Diario Oficial publicó la Ley N° 20.930 que establece el Derecho Real de Conservación, un nuevo instrumento del ordenamiento jurídico que tiene por objetivo contribuir a la protección y el resguardo del patrimonio de nuestro país en manos de privados.
 
Lo novedoso es que la ley, ingresada al Parlamento en 2008, no solo puede aplicarse a la conservación del medio ambiente sino también en el ámbito urbano, como los barrios patrimoniales, incluyendo áreas verdes, de entretención y elementos arquitectónicos.
 
"En concreto, este nuevo derecho real se orienta a facilitar la conservación en el largo plazo de la más variada gama de hábitats naturales o de 'intangibles' ambientales o servicios ecosistémicos, tales como provisión de agua, valor paisajístico, polinización, información biogenética, recreación, mantención de usos tradicionales, mitigación de efectos negativos de catástrofes, como también de prácticas o valores socioculturales asociados al medio natural o al medio creado por el hombre", señala Jaime Ubilla, director fundador del Centro de Derecho de Conservación, una de las ONG que impulsó la ley junto a la filial local de The Nature Conservancy (NTC) y Así Conserva Chile.
 
Modelo Pumalín
La presente norma está inspirada en un instrumento que surgió hace varias décadas en Estados Unidos bajo el nombre deservidumbre ecológica o de conservación, como un mecanismo legal y voluntario que permite al dueño de un área natural destinarla a la conservación, sin perder el derecho de propiedad sobre esta.
 
Se calcula que actualmente en Chile hay dos millones de hectáreas en manos privadas –incluidos pequeños propietarios, comunidades indígenas y grandes latifundistas– destinadas a la conservación ambiental, básicamente en la zona sur y la Cordillera de los Andes, con ecosistemas únicos.
 
Hay ejemplos icónicos como el Parque Pumalín, de 300.000 hectáreas, del fallecido estadounidense Douglas Tompkins, en la Región de Los Lagos, pero también están el Parque Tantauco, del ex Presidente Sebastián Piñera (Chiloé), y la Reserva Costera Valdiviana (de NTC), varias de las cuales combinan ecología y turismo. En manos fiscales, la cifra llega a unas 14 millones de hectáreas.
 
Rodrigo Catalán, director de Conservación de la filial local del World Wildlife Fund (WWF), explica que la ley permitirá que un inmueble con calidad de conservación la conserve más allá del fallecimiento de su propietario y un eventual nuevo dueño. Leer mas..