Dos películas con implicación muy personal de sus productores ganan el Festival de Cine de Montaña de Santiago
Por Clara Ribera
Los dos cortometrajes ganadores en el Santiago Mountain Film Festival de este año, copatrocinado por Patagon Journal, son fruto de las historias personales de los creadores de las mismas, que supieron tocar la fibra del jurado y la audiencia más que mostrar grandes espectáculos naturales.
Ambos cortometrajes son, en este caso, los primeros trabajos profesionales los creadores: Daniel Pastene, con el primer premio por El mono de Cochamó, y los hermanos Contreras con el premio del público por Cordada de sangre.
Homenaje al Mono
El mono de Cochamó, ya ganadora del Festival Internacional de Montaña de Bariloche “Noche de Fogón” 2016, cuenta la historia de Cristian Gallardo “El Mono”. Se trata de un homenaje por parte de su amigo, y productor de la película, Daniel Pastene, quién considera al Mono uno de sus maestros.
Pastene es un músico chileno que regresó de vivir doce años en Bélgica en 2013. Llegó al refugio de Cochamó de la mano de la red WWOOF –voluntariados en proyectos ecológicos– donde conoció al Mono. “El reflejaba esa búsqueda personal que yo tenía: el conectarse con los ciclos naturales, el cambio de la ciudad a la naturaleza”, cuenta Pastene. Ahora trabaja como encargado en el refugio todas las temporadas de verano desde que llegó.
Después del éxito de su primer cortometraje, Daniel Pastene ya prepara un documental sobre un clarinetista argentino establecido en Chile y prevé seguir presentando trabajos audiovisuales en el futuro.
Mira El mono de Cochamó
Reto familiar
Cordada de sangre, producida por Chileafondo, es una creación familiar de los hermanos Contreras: Felipe (25) , Diego (24) y Juan Pablo (23). Cuenta la historia de cómo ellos tres se prepararon y escalaron las Torres del Paine en enero pasado.
“Sabíamos que se trataba de un proyecto muy grande, y no estábamos seguros de poderlo lograr”, cuenta Juan Pablo Conteras, el hermano que coordinó la edición y producción del cortometraje. Después de Diego superar un trasplante de riñón, entrenarse siete meses sin pausa en Puerto Varas y Cochamó, y tener toda la logística preparada, lograron escalar las Torres y producir el documental que muestra la hazaña.
Juan Pablo, Diego y Felipe forman parte de una familia de seis hermanos, todos muy unidos. “Lo que me motiva de escalar es hacerlo con mis hermanos. Escalar con ellos me da confianza y nos anima a seguir”, dice Juan Pablo. Solo hace tres años que empezaron a escalar, pero lo hicieron con mucha motivación. Ahora regentan el Iguana Boulder en el centro de Puerto Varas.
Después del proyecto de las Torres ya están empezando a planificar su próxima ascensión, la cual aún no saben donde les llevará, pero después del éxito de Cordada de sangre, seguro que realizarán un cortometraje para contarlo.
Cordada de sangre aún no está disponible al público.