
Por Paula Fernández
Los huemules son criaturas esquivas y místicas, que se rehúyen de los seres humanos y son difíciles de avistar. Y no es raro que sea así. A pesar de su importancia cultural y ecológica en la Patagonia chilena y argentina, el huemul (Hippocamelus bisulcus) ha sido cazado hasta el borde de la extinción y la especie, endémica de los bosques del sur de la cordillera de los Andes, está clasificada como en peligro de extinción en la Lista Roja de la UICN. Se estima que solo quedan 2000 ejemplares.
Su conservación no solo es crucial por su valor intrínseco, sino también por su rol como especie paraguas, ya que su protección beneficia a numerosos ecosistemas y otras especies.
La buena noticia es que hay un nuevo registro de esta especie donde aún no se habían visto: el Fundo Pucheguin, de 133.000 hectáreas, situado en las inmediaciones de Cochamó, en la región chilena de Los Lagos. El descubrimiento se debe a una serie de cámaras trampa instaladas dentro de los terrenos por el grupo ambientalista del sur de Chile Puelo Patagonia en enero de este año.
Víctor Masías, de la comunidad local y de los primeros en revisar las imágenes, expresó su sorpresa y satisfacción al conocer su presencia allí. “Sabía que habían aquí porque la gente antigua hablaba que alguna vez alguien vio algo, pero realmente es muy difícil verlos, pero ahora se comprueba que hay y es una excelente noticia”.
Andrés Diez, de Puelo Patagonia, instalando una cámara trampa.Corredor biológico
Las pruebas inéditas de la presencia del huemul en la extensa propiedad privada de Puchegüín —unas 88 imágenes y vídeos— forman parte del trabajo que Puelo Patagonia lleva a cabo desde 2019 para estudiar y proteger esta especie en la región de Puelo. Las imágenes fueron obtenidas en sectores de alta montaña con bosques de lenga, estepas altoandinas y zonas rocosas. Tras décadas sin registros oficiales, la organización ha logrado finalmente documentar la presencia del huemul en la comuna de Cochamó.
Además, la propiedad Fundo Pucheguín forma parte de un corredor biológico de importancia mundial de 1,6 millones de hectáreas, lo que se suma a la urgencia de conservar estas tierras, según Andrés Diez, director ejecutivo de Puelo Patagonia. "Este nuevo registro refuerza la urgencia de resguardar el hábitat, no solo como hogar de esta especie, sino como parte de un ecosistema único que necesita protección”, afirmó Diez.
Un huemul en invierno captado por una cámara trampa.El huemul en Puchegüín
Entre seis y ocho huemules diferentes, entre ellos machos adultos, un macho juvenil y una hembra adulta, fueron captados por las cámaras trampa. Fernando Novoa, investigador del programa de monitoreo de Puelo Patagonia, destacó que si bien las poblaciones registradas son pequeñas, se apreciaron en un estado saludable. “Encontrar huemules en esta zona demuestra que es un lugar que está bien cuidado gracias al estilo de vida de sus pobladores, quienes han convivido en armonía durante mucho tiempo con especies como el huemul”.
Para el grupo, el hallazgo marca un primer paso para el reconocimiento de la presencia del huemul en esta zona, y planean intensificar el monitoreo con cámaras trampa y profundizar un trabajo mancomunado con Argentina para estudiar el comportamiento de esta especie.
Actualmente, la propiedad Pucheguin, donde también se han avistado otras especies en peligro de extinción, como la vizcacha patagónica y el monito del monte, no cuenta con una protección legal efectiva a pesar de su altísimo valor ecológico. La agrupación advierte que esta situación la deja vulnerable a amenazas como loteos, proyectos industriales, incendios y turismo no regulado. Su protección consolidaría además uno de los corredores biológicos más grandes de América Latina, facilitando el movimiento de la fauna silvestre y conectando hábitats fragmentados.
Puelo Patagonia, junto con el grupo conservacionista internacional The Nature Conservancy, dos fundaciones estadounidenses, la Fundación Freyja y la Fundación Wyss, y la empresa de equipamiento outdoor eco-consciente Patagonia, Inc., llevan trabajando desde abril de 2024 para comprar la propiedad y convertirla en un área protegida que salvaguarde tanto la biodiversidad como los modos de vida locales.
Recaudación de fondos
La alianza de organizaciones busca recaudar 78 millones de dólares para comprar el terreno y poner en marcha un plan de conservación y desarrollo comunitario durante un periodo de siete años. Pero es una carrera contra el tiempo.
Josefina Vigoroux, directora de comunicación de Puelo Patagonia, declaró a Patagon Journal que cualquier persona puede contribuir a la iniciativa Conserva Puchegüín: "Ya hemos recibido aportes desde más de 15 países, incluidos muchos chilenos que han querido ser parte de este esfuerzo por proteger un territorio de alto valor ecológico y cultural en la Patagonia. Gracias a ese compromiso, ya hemos recaudado más del 50% de la meta total”.
Para obtener más información sobre cómo contribuir o simplemente para ayudar a difundir la iniciativa, visite el sitio web de Conserva Puchegüín en www.conservapucheguin.org



